viernes, 2 de abril de 2010

Stabat Mater - Teatro Del Libertador

Muy buena función del "Stabat Mater" de Rossini, con un buen marco de público.


Al querer comprar las entradas, llego a boletería y se da la siguiente conversación:
Yo- ¿Qué lugares quedan en cazuela para el Stabat Mater?
Chica de Boletería- ¿Para qué?
Yo- El Stabat Mater...
CdB- ¿Ah?
Yo-(Señalando cartelito pegado en vidrio) Para el concierto de la orquesta y el coro...
CdB- ¿...?
Yo-¡Para éste! (señalando de nuevo el cartelito)
CdB- ¡Ah! ¡Para el concierto del primero!
Yo- Sí, sí... "el concierto del primero"...

Busca el talonario y seguimos:
CdB- ¿Centro?
Yo- Sí, primera fila y al medio.
CdB- Tengo (supongamos, ya no recuero bien los números) 36 y 37, primera fila.
Yo- ¿Están una al lado del otro?
CdB- Sí, sí.

A todo esto, el Teatro tapado por andamios poque se viene una "Puesta en valor" de la fachada.
Pongan en valor la programación, eso es lo que hace falta.

Entramos, llegamos a cazuela, nos dan un par de fotocopias sacadas con tóner bajo o de mala calidad en vez de un programa de mano y entonces...

Acomodador- Sus asientos están separados por una columna...

Gracias a un joven que amablamente cambió su lugar, pude sentarme junto a mi invitada. Me acordé de la chica de boletería (si bien me parece "inimputable") y de la (nueva) Dirección del Teatro (en muy malos términos, claro).

Vamos al Stabat Mater.

El cuarteto de solistas prometía: Nora Oviedo, Roy David Pullen Llermanos, Inés Brusco y Daniel Asrín. Y cumplió.

Nora Oviedo nos vuelve a dejar más que satisfechos con una voz exquisita, brindando una interpretación segura, sin fisuras. Al ir al Teatro, uno va con la tranquilidad (y la alegría) de saber que el rol estará muy bien cubierto si canta ella. Excelente. En apenas un nivel un poquito más bajo por alguna nota alta que no sonó muy grata, Inés Brusco, de quien ahora no recuerdo en qué otra oportunidades la he escuchado, demostró poseer un muy buen volumen y una bella voz. Brava.

Roy David Pullen Llermanos (que yo recordaba como David Roy Pullen, una promesa de "Otilia Armas", hace ya muchos años), saca una voz de bajo potente, profunda, con una dicción un tanto extraña, pero redondeando una muy buen trabajo. La soltura y tranquilidad que demostraba en el escenario era contagiosa. Un aparte: ¿nadie le pudo acomodar bien el cuello de la camisa, que quedaba por encima del saco del traje?

Daniel Asrin cumplió su labor con aplomo, si bien se echó en falta un poco más de volumen, llevó adelante su parte sin problemas, demostrando un gran crecimiento. Bravo.

Coro y Orquesta sonaron espléndidos, con una muy buena dirección por parte de Ávila Arzuza.

Se echó en falta el sobretitulado electrónico. Si lo tenemos ¿por qué no lo usamos?

Una pena que sea una sola función.

Saludos.





6 comentarios:

  1. A mí ni me dieron "programa de mano"...

    Todo lo demás se disfrutó mucho. :)

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  2. las voces para el stabat mater no fueron las apropiadas.qiero decir los 4 solistas.lastima orque la obra es muy linda-

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  3. Aguante mi mama!! (NOra Oviedo) =)

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  4. Me quedo con las solistas femeninas, de gran calidad interpretativa y excelencia vocal. No tengo dudas...coro y orquesta maravillosa¡¡¡disfrutè muchísimo el concierto. FELICITACIONES¡¡¡

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  5. Anónimo 1: ¿por qué no fueron apropiadas? Gracias por tu comentario.

    Anónimo 2: Sí, aguante, jaja.

    Ana Orozco: de acuerdo contigo, gracias por tu comentario. Saludos!

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  6. Lastima que no estuve alli!!! conozco al bajo Roy david Pullen Llermanos y tiene una voz bellisima ademas de ser un ser humano excepcional!!! Bravi a tutti!!!

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